George Orwell en el Barbastro de 1937
Portal del antiguo hospital de San Julian, 1937 Fragmentos extractos de Orwell en España (Pag. 80) (...) Barbastro, aunque muy lejos del frente, parecía desolado y castigado. Regueros de milicianos desarrahapados iban y venían por las calles para entrar en calor. En una pared medio derruida un cartel del año anterior anunciaba, que se iban a lidiar "seis magníficos toros" en tal y tal fecha. Qué tristes parecían sus borrados colores. ¿Adónde estarían en aquellos momentos los magníficos toros y toreros?. Creo que ni siquiera en Barcelona habían ya corridas de toros; no sé por qué los mejores toreros eran fascistas. Mi compañía se trasladó en camión a Siétamo y más tarde hacia el oeste, hacia Alcubierre (...) (Pag. 132) (...) Dormimos unas horas en un pajar de Monflorite, subimos a un caminón de madrugada, tomamos el tren de las cinco en Barbastro, y tras tener la suerte de empalmar con un tren rápido en Lérida, llegamos a Barcelona a las tres de la tarde del 26